lunes, 20 de diciembre de 2010

Continúa la impunidad criminal

MÉXICO .- Manuel Monge Amparán, cuñado de Marisela Escobedo, activista asesinada el jueves frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua, fue encontrado sin vida la mañana del sábado en calles de la colonia Constitución, de la fronteriza Ciudad Juárez, horas después de que fue "levantado" por un comando.

De acuerdo con El Diario de Juárez, fue ayer cuando se dio a conocer la identidad del cuerpo que fue hallado el sábado a las 11:08 horas.

De acuerdo con información de la Fiscalía General del Estado, la víctima encontrada era Manuel Monge Amparán, hermano de José Monge Amparán, pareja sentimental de la activista Marisela Escobedo.

"El Diario de Ciudad Juárez" añadió que los datos oficiales difundidos indican que Monge falleció por "asfixia por sofocación", y los datos proporcionados desde el sábado indicaron que "la víctima se encontraba envuelto con una cobija a rayas de color morado y azul", sin huellas visibles de violencia ya que tenía el rostro cubierto con una bolsa de plástico y estaba atado de pies y manos con cinta adhesiva en color gris.

El sábado, un comando "levantó" a Manuel Monge de la maderería de su hermano. Los hombres armados rociaron gasolina y prendieron fuego al negocio antes de huir.

Incendian negocio del esposo de Marisela Escobedo

México,Juárez: incendian negocio del esposo de Marisela Escobedo
http://www.kaosenlared.net/noticia/mexico-juarez-incendian-negocio-esposo-marisela-escobedo
Antes de las 9 horas, un grupo de agresores roció de gasolina la maderería de José Monge Marroquín, cónyuge de la activista asesinada ayer. Reportan que 'levantaron' a su hermano y socio.

Miroslava Breach Velducea, corresponsal
Publicado: 18/12/2010

Chihuahua, Chih. Un negocio de maderas, propiedad de José Monge Marroquín, esposo de la señora Marisela Escobedo, asesinada el jueves, fue quemado esta mañana en Ciudad Juárez y uno de sus copropietarios levantado por un comando armado.

La fiscalía general del estado, confirmó que de acuerdo a los primeros reportes, un grupo armado llegó hasta el negocio ubicado en la colonia La Cuesta, y le prendió fuego al inmueble rociándolo con gasolina.

La empresa, denominada Maderas y Materiales Monge, ubicada en las calles Oscar Flores y Sierra Madre del Sur, en la colonia La Cuesta, es propiedad de José Monge Marroquín, esposo de Marisela Escobedo y durante el ataque fue levantado su hermano y socio, Arturo Monge Marroquín.

En el incendio se reportaron pérdidas totales.

El ataque fue perpetrado esta mañana, cuando los restos de la activista Marisela Escobedo Ortiz estaban siendo velados por sus familiares en una funeraria de Ciudad Juárez, donde la policía única del estado, montó vigilancia permanente.

El vocero de la fiscalía general del estado, Carlos González, dijo que hasta el momento, con los datos que se tienen no se puede establecer que tanto el incendio como el levantón de uno de los propietarios del negocio de maderas incendiado, tengan relación con la muerte de la señora Escobedo.

http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2010/12/18/ciudad-juarez-incendian-madereria-propiedad-de-pareja-sentimental-de-activistas-marisela-escobedo

Movilización por asesinato de la activista Marisela Escobedo

México: Movilización por asesinato de la activista Marisela Escobedo. Autoridades responden con la fuerza pública
http://www.kaosenlared.net/noticia/mexico-movilizacion-asesinato-activista-marisela-escobedo-autoridades-
Organizaciones civiles se movilizaron en la Ciudad de México y en Chihuahua para exigir justicia ante el asesinato de Marisela Escobedo Ortiz y un alto a los feminicidios en México.
Foto: Yasmín Ortega Cortés/La Jornada

Cómo se había programado desde que se difundió la noticia del asesinato de activista Marisela Escobedo Ortiz, diversas organizaciones ciudadanas se movilizaron en la Ciudad de México para reclamar a las autoridades el castigo a los responsables por el atroz homicidio.

La respuesta ante las movilizaciones no se hizo esperar y las fuerzas de Seguridad Pública del Distrito Federal se desplegaron para impedir el paso a las y los manifestantes en la Ciudad de México, quienes primero se apostaron a las puertas de la Secretaría de Gobernación, sin embargo, ante el impedimiento por parte de la fuerza pública se dirigieron al Paseo de la Reforma donde realizaron bloqueos por algunos minutos, para después dirigirse a las oficinas de la Procuraduría General de la República. En la ciudad de Chihuahua también se realizaron movilizaciones, incluso, ciudada@s improvisaron un altar a las puertas del Palacio de Gobierno, lugar donde fue ultimada Marisela.

El feminicidio de Rubí Frayre Escobedo, hija de Marisela Escobedo, ocurrido en 2008 es uno más de los cientos que permanecen impunes en México, de esto es responsable el Estado, ya que ha permitido la proliferación de los asesinatos de mujeres por el simple hecho de ser mujeres.

Cesar Duarte, gobernador de Chihuahua, dio a conocer la noticia de la destitución de los jueces que liberaron a Sergio Rafael Barraza Bocanegra, asesino de Rubí Frayre, sin embargo esta medida es insuficiente, es necesario castigar penalmente a todos los que permitieron que Sergio Rafael Barraza fuera absuelto a pesar de haber confesado su crimen; también a quienes se negaron a escuchar y proteger a la activista quien ya había señalado las amenazas por parte de la familia del asesino de su hija. El Estado mexicano es responsable, por acción y omisión, de la muerte de Marisela Escobedo Ortiz.

Kaos. México


Asesinato de Marisela Escobedo desata indignación en diversos sectores del país

F. Camacho, M. Norandi, A. Becerril, A. Muñoz, G. Saldierna y C. Arellano

La Jornada

El asesinato de la activista Marisela Escobedo Ortiz, ocurrido la noche del jueves frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua, despertó una reacción unánime de indignación en activistas, legisladores y académicos, quienes exigieron castigo a los responsables del crimen y acciones contundentes de las autoridades para detener losfeminicidios en todo el país.

Ayer, en la ciudad de México, unas 150 personas se manifestaron ante la sede de la Secretaría de Gobernación (SG) para expresar su repudio al asesinato, y bloquearon alrededor de 20 minutos Paseo de la Reforma, a la altura de la Procuraduría General de la República (PGR).

En medio de consignas como No más violencia contra las mujeres y Si tocan a una, nos tocan a todas, los inconformes fueron replegados y cercados por un grupo de granaderos, para, finalmente, acordar con Lorenzo Gómez Hernández, director de Atención Ciudadana y Concertación Política de la SG, que este lunes se pondrían en contacto para agendar una posible reunión.

Los manifestantes, en voz de María de la Luz Estrada, del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio, y Andrea Medina Rosas, coordinadora de la Red Mesa de Mujeres de Ciudad Juárez, demandaron que en un plazo no mayor a 21 días, las autoridades les den fecha y lugar para dialogar con los titulares de la PGR, Arturo Chávez Chávez, y Gobernación, José Francisco Blake Mora.

Asimismo, pidieron reunirse con el gobernador chihuahuense César Duarte; el alcalde de Ciudad Juárez, José Reyes, y los coordinadores de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (Conavim), y de la Fiscalía Especial para los Delitos de Violencia contra las Mujeres y Trata de Personas (Fevimtra).

Por su parte, organizaciones feministas señalaron que el asesinato de Marisela Escobedo demuestra una vez más que el Estado mexicano no está siendo capaz de garantizar la vida y la seguridad de las mujeres ni de los luchadores sociales.

“Se requiere un cambio de timón a nivel nacional, porque lo que estamos viendo es una guerra contra la ciudadanía, una represión de los defensores de derechos humanos y una victimización de las mujeres frente a losfeminicidios” aseguró Ángeles López García, directora del Centro de Derechos Humanos Victoria Diez, organización integrante del Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio.

Alejandra Sepúlveda, de la organización feminista Pan y Rosas, exigió al gobierno justicia para las muertes de Marisela y Rubí, que se tomen todas las medidas necesarias para el cuidado de la hija de Rubí –que hoy queda por segunda vez huérfana– y que se ponga un alto al feminicidio y a la persecución de luchadores sociales.

Senadores de PAN y PT condenaron el asesinato y exigieron que se investigue a fondo, para impedir que el delito quede en la impunidad. Es urgente que todos los órdenes de gobierno redoblen los esfuerzos para rescatar a Chihuahua y las demás entidades del país que viven secuestradas por la criminalidad, advirtió el panista Ramón Galindo.

Por separado, el senador del PT Ricardo Monreal expresó que ese asesinato provoca indignación, ya que se trata de una luchadora social que pugnaba porque se castigue al homicida de su hija y no sólo no fue escuchada por las autoridades, sino que fue también ultimada por criminales.

El consejo nacional del PRD consideró que el feminicidio de Marisela Escobedo es un crimen de Estado solapado por las autoridades estatales (de Chihuahua) y federales. Ante ello, el presidente del partido, Jesús Ortega Martínez, exigió la renuncia del gobernador César Duarte y del procurador general de la República, Arturo Chávez Chávez.

En la Cámara de Diputados, la bancada perredista también condenó el asesinato en voz de la legisladora Leticia Quezada, quien consideró inverosímil que Escobedo haya sido asesinada casi frente a los ojos de la autoridad, por un hombre que podría ser el mismo que ultimó a su hija Rubi Frayre en 2008.

El secretario ejecutivo de relaciones públicas e institucionales de la Conferencia del Episcopado Mexicano, Manuel Corral, calificó de lamentable y dolorosa la muerte de Escobedo, y advirtió que hemos llegado a límites de extrema violencia que a todos nos afecta.

Por la noche, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos emitió un comunicado en el que demandó a las autoridades una indagatoria eficaz para resolver los asesinatos y llevar ante la justicia al o a los responsables.


Mujeres se declaran en "alerta roja" por el asesinato de Marisela Escobedo

Luis Carlos Cano C.

La Silla Rota

La indignación por el asesinato de Marisela Escobedo Ortiz corrió del norte al centro del país, en voces y cuerpos de mujeres que salieron a las calles de Chihuahua y el Distrito Federal a exigir justicia para la mujer que fue victimada tres veces. Una, con el asesinato de su hija, luego la liberación de su presunto asesino. Y la tercera, la seguramente definitiva, cuando en 15 segundos un hombre la atajó y le quitó la vida al frente del palacio de gobierno del estado de Chihuahua.

En Ciudad Juárez, su tierra, integrantes de organizaciones civiles que se plantaron fuera de las oficinas de la Fiscalía General de Justicia se declararon en "alerta roja" por lo que calificaron como "un crimen de Estado".
Francisca Galván --de la organización Defensora de los Derechos Humanos Paso del Norte--, dijo que Marisela era una líder muy importante y su asesinato “nos deja en alerta roja porque existe la amenaza para otras activistas defensoras de los derechos humanos y de las mujeres”.
Dijo que no está de acuerdo con la línea de investigación que dio a conocer la Fiscalía de que el exyerno de Marisela Escobedo, Sergio Rafael Barraza y responsable del homicidio de su hija Rubí Marisol, fue quien la mató.
“Este es un crimen de Estado por la forma como fue el caso de su hija. Ella investigó, encontró al responsable, lo obligó a decir dónde estaba enterrado el cuerpo y a pesar de eso un panel de tres jueces lo dejó en libertad. Marisela fue víctima de la impunidad y el desprecio de las autoridades mexicanas que han incumplido sistemáticamente todas sus obligaciones en materia de derechos humanos de las mujeres”.
En tanto, en la Ciudad de México, mujeres que se manifestaron en demanda de justicia para la activista Marisela Escobedo, fueron reprimidas por la policía del Distrito Federal. El contingente primeramente se plantó frentre a la sede de la Secretaría de Gobernación, donde fue rechazado por elementos de la Policía Federal.
Posteriormente se movilizó por la Avenida de la Reforma esquina con Insurgentes, donde se detuvo por espacio de 15 minutos. Después se plantaron frente a la Procuraduría General de la República, lugar donde la policía del Distrito Federal lo replegó a la lateral de la Avenida Reforma. Ahí fueron atendidas por un funcionario de Gobernación.
Una voz amenazada
A principios de diciembre, en el foro de los derechos humanos organizado en Juárez, en una entrevista Marisela Escobedo Ortiz dio a conocer que había sido amenazada de muerte por familiares de Sergio Rafael Barraza, ya que un hermano del asesino de su hija le dijo que acabaría con ella si seguía buscándolo.
La activista, en esos días, comentó que "gente de Fresnillo, Zacatecas, que de noble manera le brindaba información, le dijo que la pareja del hermano de Rafael Barraza había indicado que este sujeto acabaría con ella si seguía buscándolo”.
Su hija, motivo por el que Marisela, enfermera, se integra a la lucha social, era Rubí Marisol, quien tenía 16 años cuando fue asesinada por Sergio Rafael en agosto de 2008.
El cuerpo de la joven fue encontrado casi un año después junto a huesos de cerdo, en un terreno.
Marisela, junto con las abogadas del Centro de Derechos Humanos de las Mujeres (CEDEHM), que un tribunal de casación (integrado por tres magistrados) rectificara la decisión de los jueces que primero lo liberaron, logró obtener una sentencia condenatoria contra Sergio Rafael, asesino confeso, en el que se le condenaba finalmente a 50 años de prisión. Pero tuvo tiempo para darse a la fuga.
En Chihuahua realizaron otra protesta frente a palacio de gobierno, exactamente en el sitio donde mataron a Escobedo Ortiz.
Lucha Castro, coordinadora del Centro de Derechos Humanos de las Mujeres (CEDEHM), dijo que no se puede descartar ninguna línea de investigación, incluida la de un crimen de Estado, "pues Marisela no iba a parar hasta que detuvieran al asesino de su hija".
Desafuero para los jueces
Por su parte, el gobernador César Duarte determinó el desafuero de los jueces Netzahualcóyotl Zúñiga Vásquez, Rafael Boudib Jurado y Catalina Ochoa Contreras, responsables de dejar en libertad al homicida confeso de la menor Rubí Marisol.
“Se le está dando un seguimiento puntual al hecho y tenemos una línea de investigación inmediata a quien asesinó a la hija de la señora Maricela Escobedo. Este sujeto fue novio de la hija de la señora y, desgraciadamente, asesinó a su hija”, dijo el gobernante.
Marisela murió a las puertas de Palacio de Gobierno y frente a la cruz de clavos que colocaron la red de Mujeres de Negro y madres de las jóvenes victimas en el estado de Chihuahua. Dijeron que Marisela fue asesinada en su lucha por hacer justicia.
Por su parte, Carlos Manuel Salas, fiscal General del Estado de Chihuahua, dio a conocer que “el asesino de Marisela Escobedo, ultimada ayer en Palacio de Gobierno, no es Sergio Rafael Barraza Bocanegra, sino un sujeto desconocido”.
El titular de la Fiscalía Estatal señaló que en la escena del crimen estaban junto con Marisela uno de los hermanos de la occisa, una acompañante y la hija de Rubí Frayre, éstas dos últimas en la camioneta que se encontraba estacionada frente a la Cruz de Clavos que recuerda todos los feminicidios que se han presentado en Chihuahua.
Descartó que se trate de Barraza Bocanegra debido a que los testigos afirmaron que era una persona distinta, que jamás habían visto, forcejeó y persiguió en particular a la activista Marisela Escobedo hasta dispararle en la cabeza.
Marisela, siendo especial, pasa a la lista de mujeres que en este año han sido asesinadas en Chihuahua. Son 302, según el conteo de la Subprocuraduría de Justicia Estatal, Zona Norte, a través de lo que llaman Protocolos de Comunicación. Casi una por día.
Son 427 registrados de enero de 1993, al 31 de diciembre de 1997, fechas en las que se registraron los llamados feminicidios. El 2008 se cometieron 87 homicidios, y en el 2009 tuvo un total de 164 casos.
Por su parte, mediante un comunicado, el gobierno federal condenó "el cobarde homicidio de la señora Marisela Escobedo Ortiz, perpetrado el día de ayer en la ciudad de Chihuahua. A sus familiares y amigos, manifiesta las más sentidas condolencias".
En el boletín reprobó el desempeño de los tres jueces del Poder Judicial del Estado de Chihuahua,que dictaron sentencia absolutoria del presunto homicida de Rubí Frayre, hija de la señora Escobar Ortiz.
"?El gobierno federal --concluyó-- exhorta a las autoridades judiciales de Chihuahua a evitar que con decisiones como esta,propicien espacios de impunidad que generen violencia como la demostrada con este asesinato."
Cronología:
-Rubí Marisol Frayre Escobedo fue reportada como desaparecida en septiembre de 2008 por su madre Marisela Escobedo, quien afirmó que Sergio Rafael le había confesado a su padre haber asesinado a Rubí, por lo que presuntamente fue entregado a la Policía Municipal, pero fue liberado al no encontrar evidencia del delito.
- El 16 de junio de 2009 Sergio Rafael Barraza Bocanegra fue detenido en Fresnillo, Zacatecas, y trasladado a Chihuahua junto con su hija, la que fue entregada a la abuela materna, es decir, a Marisela.
- El 18 de ese mes Barraza Bocanegra presuntamente confesó a policías ministeriales el crimen cometido y dio a conocer el lugar exacto donde estaba el cuerpo de Rubí.
- Los restos de Rubí Marisol fueron localizados en un basurero de la colonia Fronteriza Baja por elementos de la Unidad Especializada de Investigación de Personas Ausentes y/o Desaparecidas.
- Magistrados liberaron a Barraza por considerar que las pruebas presentadas por el Ministerio Público eran insuficientes. Desde entonces Marisol emprendió acciones para exigir la reaprehensión del asesino de su hija.
- En un recurso de casación, un Tribunal de Segunda Instancia revocó la absolución de Barraza Bocanegra y le dictó sentencia de 50 años de prisión, pero éste ya había abandonado la ciudad y no fue reaprehendido, lo que generó que Marisela Escobedo emprendiera la búsqueda por sus propios medios.
- Marisela encontró al homicida en Zacatecas en un domicilio que fue rodeado por la policía de aquella ciudad, pero logró escapar de nuevo al no existir reporte de búsqueda girada por autoridades de Chihuahua.
- La Procuraduría de Justicia del Estado ofreció una recompensa de 250 mil pesos a quien proporcionara información que permitiera la captura del homicida, lo que a la fecha no ha ocurrido.
- Apenas el sábado pasado, Marisela recibió de parte de unos vecinos una carta donde presuntamente Sergio confiesa, otra vez, que él mató a Rubí Marisol. Ese mismo día la mujer dijo que había sido amenazada por familiares de Barraza. La carta decía así:
“En donde quiera que te encuentres mi amor quiero que sepas que te amo, y te pido perdón, perdoname por aberte pribado (sic) de tu vida mi amor”, dice la misiva. Marisela aseguró que vecinos de la familia Barraza se la entregaron luego de encontrarla entre la basura que dejó la familia del acusado, cuando abandonó la ciudad.
El escrito está en una hoja de cuaderno de rayas, por un lado le dirige unas palabras a Rubí, asesinada y calcinada a finales de 2008. Al reverso le dirige una palabras a la hija de ambos, Heidy Rubí, ahora de dos años de edad.

Video de la movilización en Ciudad de México y la respuesta de las autoridades

La Silla Rota

http://www.youtube.com/watch?v=bDxpUtOm-G0&feature=player_embedded

México: Crimen de Estado; asesinan a Marisela Escobedo.

México: Indignante asesinato de una activista que exigía justicia para su hija asesinada
http://www.kaosenlared.net/noticia/video-mexico-indignante-ejecucion-activista-exigia-justicia-para-hija-
Marisela Escobedo Ortiz fue ejecutada mientras protestaba frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua por la liberación del asesino confeso de su hija Rubí.

Ultimo Momento: Policía Federal reprime manifestación por asesinato de Maricela Escobedo
SDP

De acuerdo a reportes emitidos en twitter por diversos usuarios, alrededor de 50 manifestantes se enfrentaron con elementos de la policía federal en las inmediaciones de la Segob.

Ciudad de México.- Según un reporte publicado en la red social Twitter, la policía federal esta reprimiendo a los activistas que se manifiestan, afuera de la secretaría de Gobernación, por el asesinato de Marisela Escobedo.

De acuerdo a reportes emitidos en twitter por diversos usuarios, alrededor de 50 manifestantes se enfrentaron con elementos de la policía federal en las inmediaciones de la Segob.Por otra parte, también se reporta que al no ser recibida una comisión en la Segob los manifestantes se dirigieron hacia las instalaciones de la PGR en Reforma.


EL ASESINATO DE MARISELA ES UN CRIMEN DE ESTADO
Kaos. México

Marisela Escobedo Ortiz protestaba frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua la noche del 16 de diciembre al momento en que fue ejecutada a sangre fría. Tres jueces, en un juicio oral amañado, decidieron poner en libertad al asesino confeso de su hija Rubí.

Este crimen de estado-tanto poder judicial como ejecutivo en los niveles estatal y federal son responsables-pone nuevamente el "dedo el la herida" respecto al tema de la indefensión en que se encuentran las mujeres en México. Es inadmisible que se haya liberado a un asesino confeso y las autoridades estatales y federales se hallan negado a escuchar siquiera a la madre que clamaba justicia para su hija.

La señora Marisela se había convertido en un personaje incómodo para el gobierno de Cesar Duarte, ya que su caso puso en evidencia, una vez más, la impunidad que impera en el estado de Chihuahua y en todo México.

A medida que han pasado las horas se han multiplicado las expresiones de repudio por este brutal feminicidio. diversas organizaciones de defensa de los derechos humanos y de las mujeres han levantado la voz para exigir justicia y han llamado a movilizarse contra de estos atroces contecimientos.

Nos sumamos a las voces de condena por este asesinato y por los cientos de feminicidios que en México permanecen impunes.

Kaos. México


Ejecutan a mujer que encaró a las autoridades de Chihuahua por liberar al asesino de su hija

Miroslava Breach Velducea

La Jornada

Marisela Escobedo Ortiz, quien se mantuvo en plantón en la plaza Hidalgo durante las dos semanas recientes para exigir justicia por el asesinato de su hija Rubí Frayre Escobedo –perpetrado en 2008 por Sergio Rafael Barraza Bocanegra, a quien se exoneró en un juicio oral en mayo pasado y sigue prófugo– fue asesinada esta noche de un balazo cuando se encontraba a las puertas del palacio de gobierno. El atacante la mató cuando colocaba una manta de protesta.

Testigos dijeron a la policía que el individuo se acercó a la activista, le disparó y huyó sin que alguien intentara detenerlo.

Marisela Escobedo comenzó sus protestas en demanda de justicia después de que Sergio Rafael Barraza, pareja de Rubí, fue liberado por tres jueces que consideraron que por "técnica jurídica" no podían condenarlo, a pesar de que confesó el homicidio.

Los jueces consideraron que las declaraciones de Barraza Bocanegra y de los testigos fueron insuficientes para demostrar la responsabilidad de Barraza, y con base en esta duda dictaron sentencia absolutoria.

El juicio fue repuesto y un tribunal de casación condenó a Barraza a 50 años de cárcel; sin embargo, el homicida huyó en cuanto fue liberado.

Escobedo reclamaba que se persiguiera a Barraza con la misma eficiencia con que se capturó a los presuntos responsables del secuestro y homicidio de Humberto Medina Vela, familiar del gobernador César Duarte.


Manifestamos nuestra indignación y profundo dolor ante el asesinato de la compañera Marisela Escobedo Ortiz

Nuestras Hijas de Regreso a Casa A.C.

A pesar de los claros mensajes que nos deja el asesinato de la compañera Marisela, este hecho indignante no nos detendrá. Seguiremos esta lucha de manera incansable. Su espíritu decisivo, su energía para defender el caso de su hija, su firmeza de carácter y demás cualidades que la hicieron una gran defensora de los derechos humanos, serán nuestra guía y ejemplo para continuar el camino por la justicia y la verdad. La muerte de la compañera nos deja en la más profunda tristeza, pero a la vez nos impulsa a trabajar con más fuerza por lograr nuestros propósitos, que eran los suyos.

Con este lamentable hecho que nunca debió ocurrir, nuestros gobiernos deben asumir su responsabilidad pues también para ellos hay mensajes contundentes.

Aquí esta claro que ante la incapacidad y desinterés por parte de quienes deben poner solución a la violencia, cualquiera puede cometer este tipo de actos con la mayor impunidad. Queda demostrado que cada vez mas la defensa de los derechos humanos resulta el mayor riesgo de perder la vida en manos de gente que se escuda en un estado en decadencia donde predominan la criminalidad y el desgobierno, y la falta de respeto a los derechos humanos.aun abatidas por este terrible suceso, reiteramos en memoria de Marisela nuestro firme compromiso por la defensa de los derechos humanos.

No pararemos!!! Justicia!!!

Este ha sido el reclamo que nos acompaña en todas nuestras acciones, y ahora con mas contundencia, con mayor énfasis, con todo nuestro dolor gritaremos por ella y por todas las mujeres que han sido asesinadas.

Basta ya!!! no mas feminicidio!!! Justicia para todas!!!

Marisela ortiz rivera,

Cofundadora de

Nuestras hijas de regreso a casa. A.C.



Organizaciones se pronuncian por el feminicidio de Marisela Escobedo Ortiz

Varias Organizaciones

Ante la incapacidad y el desprecio del gobierno federal y el gobierno estatal, Marisela fue asesinada por pedir justicia para su hija Rubí.

“No me voy mover de aquí hasta que detengan al asesino de mi hija” fueron las declaraciones de Marisela, antes de colocar su pequeño campamento en la Cruz de Clavos NI UNA MÁS, en la Ciudad de Chihuahua. Estaba dispuesta a pasar navidad y año nuevo en ese lugar emblemático, en el que apenas el 25 de noviembre pasado, había participado en una manifestación junto con las madres de Justicia para Nuestras Hijas, para colocar en la cruz, más de 300 nombres de las mujeres que han sido asesinadas en el estado de Chihuahua tan sólo en este año, 2010.

Rubí, tenía 16 años cuando fue asesinada por Sergio Rafael en agosto de 2008. Desde que desapareció y su pequeño cuerpo fue encontrado en un terreno junto a huesos de marranos, la madre de Rubí, Marisela, una enfermera jubilada, dedicó su vida a buscar justicia para su hija, convirtiéndose una defensora de derechos humanos.

El mismo día que el Secretario de Gobernación, Francisco Blake, pedía a la ciudadanía “sacudirse el miedo para combatir a los criminales”, Marisela fue asesinada frente a las puertas del Palacio de Gobierno de la Ciudad de Chihuahua, mientras realizaba una protesta pacífica e indefinida para exigir a las autoridades la detención del asesino de su hija Rubí.

Marisela no sólo se sacudió el miedo, caminó durante días desde la Subprocuraduría de Justicia a la Ciudad Judicial en Ciudad Juárez para exigir sanción para el asesino de su hija. La acompañaban una carriola con su nieta de dos años y un cartel con la foto de su hija Rubí. Un tribunal de juicio oral dejó en libertad al asesino, cimbrando el sistema de justicia.

Marisela, luchadora incansable, logró junto con las abogadas del Centro de Derechos Humanos de las Mujeres (CEDEHM) que un tribunal de casación (integrado por tres magistrados) rectificara la decisión de los jueces y logró obtener una sentencia condenatoria contra Sergio Rafael, asesino confeso, en el que se le condenaba finalmente a 50 años de prisión.
“Ya me cansé de hacer su trabajo, ahora les toca a ellos” decía Marisela. Efectivamente, mientras las autoridades no lograron encontrar a Sergio Rafael, Marisela con sus propios recursos, lo ubicó en Zacatecas y dio aviso a la Procuraduría de Chihuahua, que alegó que por trámites burocráticos no pudo detenerlo.

La Procuraduría del estado de Chihuahua le informó a la madre, que en coordinación con la Procuraduría General de la República y las de los Estados “se encontraban buscando al asesino de su hija en todo el país”. Nunca lo encontraron.

Durante dos años, recorrió el país. Regresó a Zacatecas, viajó a la Ciudad de México donde solicitando audiencia con el Presiente Calderón y con el Procurador Arturo Chávez Chávez, quienes se negaron a recibirla. Se entrevistó con mandos de la Procuraduría General de la República que le prometieron que buscarían al asesino de su hija. Tampoco lo encontraron.
Días antes de ser asesinada, acudió a un acto donde se encontraba el Gobernador de Chihuahua, César Duarte y sacó una pancarta que decía “justicia, privilegio de gobiernos”. La solicitud de Marisela hizo enojar al Gobernador, como lo documentaron varios periódicos locales. El gobernador incluso la regañó y despreció. Después, logró entrevistarse con el Fiscal del estado de Chihuahua que le prometió que revisaría su caso.

Lucha Castro, coordinadora del Centro de Derechos Humanos de las Mujeres (CEDEHM) declaró “en estos momentos, no se puede descartar ninguna línea de investigación, incluida la de un crimen de estado pues Marisela no iba a parar hasta que detuvieran al asesino de su hija”.
Marisela murió a las puertas del Palacio de Gobierno y frente a la cruz de clavos que colocaron lared de mujeres de negro y madres de las jóvenes asesinadas en el estado de Chihuahua. Marisela fue asesinada por pedir justicia.

Sr. Presidente Calderón y Sr. Duarte, Gobernador de Chihuahua: ¿hasta dónde llega la responsabilidad de los ciudadanos para hacer justicia y dónde empieza su labor como autoridades?
Ante tal incapacidad, cantidad de omisiones, desprecio y negligencia, el Estado mexicano es responsable y debe responder inmediatamente por el asesinato de Rubí y Marisela.

Ya basta. Ni una más.

Justicia Para Nuestras Hijas / Centro de Derechos Humanos de las Mujeres.Para mayor información: Justicia para Nuestras Hijas // info@justiciaparanuestrashijas.org // Tel.(614) 413-3355 // twitter: @jpnh01 // Centro de Derechos Humanos de las Mujeres //comunicacion@cedehm.org // Tel. (614) 415-4152.
Una activista más asesinada en Chihuahua El día de hoy amanecimos con la noticia del artero sesinato de Marisela Escobedo Ortiz, quien encabezaba una protesta a las afueras del palacio de gobierno de Chihuahua para exigir el encarcelamiento del asesino de su hija Rubí Marisol.Marisela fue baleada por un hombre que se acercó a platicar con ella cuando la protesta estaba por finalizar, y sin más, huyó sin que nadie lo detuviera.

El caso de Rubí es emblemático del tipo de justicia que en este país pueden conseguir las mujeres. Rubí fue asesinada por su pareja, quien confesó el homicidio e incluso llevó a la policía al lugar en donde abandonó el cuerpo. A pesar de esto, el asesino fue declarado inocente y dejado en libertad. Ante la presión ejercida por Marisela, finalmente fue declarado culpable y se le dictó órden de aprehensión, pero para cuando esto sucedió Sergio Rafael Barraza Bocanegra ya se había dado a la fuga.

Marisela emprendió entonces una larga lucha para conseguir justicia para Rubí, en esta cruzada; realizó sus propias investigaciones y logró ubicar al homicida en Zacatecas. En esta larga jornada, denunció haber recibido amenazas por parte de la familia de este tipo, pero por supuesto, nadie hizo caso.

En México, las mujeres víctimas de violencia pueden esperar cualquier cosa menos justicia. Las autoridades siempre encontrarán pretextos para no castigar a los homicidas y se harán de miles de argumentos para culpabilizar a las víctimas: usaba minifalda, era promiscua, era infiel y un largo etcétera que perpetua la idea de que las mujeres somos seres humanos de segunda, que nuestra vida y nuestra muerte poco o nada valen y que al final de cuentas, somos las responsables de la violencia que se ejerce en contra nuestra.

No permitamos que los homicidios de Marisela y Rubí queden impunes. Cada asesinato, cada golpe, cada insulto contra una mujer nos hiere a todas.

Alto al feminicidio

Justicia para las mujeres asesinadas

Alto a la persecusión en contra de activistas

Hoy vamos a las 17 horas a la Secretaría de Gobernación a exigir justicia para Marisela y Rubí.

Se reúnen en la Fiscalía amigas de lucha de la Madre de Rubí y rompen a llorar por falta de justicia
http://lapolaka.com/2010/12/17/dolor-y-llanto-por-marisela
Compañeras de lucha de Marisela Escobedo, asistieron a las instalaciones de la Fiscalía para lanzar un llamado a la autoridad a que se investigue el caso y se logre dar con el asesino.

Entre los presentes se encontraba Olga Esparza Ramírez, madre de Mónica Janette Alanís estudiante de la UACJ desaparecida hace un par de años, a quien en una ocasión la señora Escobedo se les unió en una marcha.

Esparza Ramírez aseguró que la pérdida es grande ya que el apoyo de la madre de Rubí era fundamental para el grupo.

-Ella era nuestra líder, nos acompaño en todos los eventos con entusiasmo… ella - dijo en tono triste Olga.

Abrazadas arribaron a la explanada del edificio estatal las señoras Evangelina Arce y Berta Alicia García a quienes se les unió en un abrazo Francisca Galván y rompieron en llanto.

Con el llanto en los ojos Evangelina Arce, madre de la joven Silvia Arce desaparecida hace 8 años, responsabilizó al gobierno de la tragedia sucedida ya que no hacer justicia y estas son las consecuencias.

Finalmente manifestó que aseguró que pedir justica puede costar la vida.

-Nos quieren callar y que dejemos todo a la deriva y que no se busque a nuestras hijas ni que se haga justicia sabiendo quienes son los culpables- señalo consternada.

Finalmente dieron a conocer que espera el cortejo fúnebre a las 16:00 horas en la glorieta del kilometro 20 en donde la recibirán con un homenaje.

http://www.youtube.com/watch?v=c2y5mNbVHn0&feature=player_embedded

lunes, 13 de diciembre de 2010

Muere María Ester Gatti



María Ester Gatti


Nació el 13 de enero de 1918, en Montevideo, en la calle Guaná 2012.

Cursó sus estudios primarios en la Escuela Pública en el barrio Cordón, donde vivía. Cuando terminó sus años escolares, ingresó en la Universidad de las mujeres y luego al Instituto Magisterial para recibirse de maestra con 17 años, en 1935.

No pudo comenzar a trabajar en la escuela pública, hasta 5 años después, al negarse a firmar una adhesión al régimen del dictador Gabriel Terra.

En 1948 se casó con Ramón Agustín Islas González de cuyo matrimonio nació el 18 de abril de 1953, su única hija Maria Emilia.

Vivió gran parte de su vida en el barrio de Colón.
Su hija Maria Emilia también inicio sus estudios de magisterio y se caso con Jorge Zaffaroni Castilla en 1973.

Perseguidos por la dictadura por su militancia política en la ROE (Resistencia Obrera Estudiantil), el matrimonio Zaffaroni- Islas debe refugiarse en la Argentina, en donde participan de la fundación del PVP.

El 22 de marzo de 1975, nace en Argentina su nieta Mariana,
El 27 de setiembre de 1976, María Emilia, su esposo Jorge Zaffaroni y su nieta Mariana, fueron secuestrados en Argentina por fuerzas militares uruguayas y argentinas.
A partir de ese momento, María Ester, convirtió su dolor en lucha iniciando una batalla, enfrentada al poder dictatorial primero y a la insensibilidad y la complicidad de los gobiernos democráticos que siguieron a la dictadura.

Junto a Luz Ibarburu de Recagno, Violeta Malugani, Maria Elena Antuña de Gatti, Irma Hernandez y Milka Prieto, inician las primeras denuncias colectivas, (entre ellas a la OEA) de los desaparecidos uruguayos en la Argentina, que darán lugar, posteriormente, a la conformación del grupo de Familiares de uruguayos Detenidos Desaparecidos en Argentina.
En 1979 cuando son ubicados los hermanitos Julien, en Valparaíso, Chile, viaja a ese país, ante la posibilidad de que su nieta haya sido llevada con ellos.

Fue una activa propulsora de las denuncias, ante los organismos internacionales y los distintos estrados judiciales nacionales y extranjeros.

Entre las múltiples gestiones y entrevistas que realiza logra interpelar al mayor Gavazzo en dictadura para reclamarle por su nieta, en el mismo domicilio de este.

Encara la búsqueda en Argentina junto con Abuelas de Plaza de Mayo, donde se recogía la información de los presuntos hijos de desaparecidos.

El 24 de julio de 1980, fallece su esposo de un ataque cardiaco..

En 1983 obtiene la primer información respeto a su nieta, al publicarse en Brasil una entrevista a un represor argentino que dice que otro represor se habría apropiado de la niña.
Viaja a Brasil con la madre de Jorge Zaffaroni, donde realiza contactos con organizaciones de derechos humanos y políticos interesados en el tema.

Posteriormente se recibe información de quien es el represor que se habría apropiado de su nieta, Miguel Angel Furcci, miembro de la SIDE argentina, dando origen a la presentación de la denuncia ante la justicia argentina.

Luego de un largo e irregular tránsito por los juzgados argentinos de la denuncia y el pedido a la justicia de medidas cautelares, se da la fuga de los apropiadores con Mariana, al Paraguay.
Posteriormente viaja a Paraguay junto con Milton Romani, siguiendo datos para ubicar a Mariana.

En 1985, presenta junto a un grupo de familiares de desaparecidos, una denuncia penal ante la justicia uruguaya, la que no prospera en virtud de la aprobación por el Parlamento el 22 de diciembre de 1986, de la Ley de caducidad.

Junto a Elisa Dellepiane de Michelini, Matilde Rodríguez de Gutiérrez Ruiz, a partir del 5 de enero de 1987, preside la Comisión Nacional pro-referéndum, movimiento que busco mediante el referéndum, anular la ley de caducidad.

En ese marco que culminó con la realización del referéndum el 16 de abril de 1989, fue una incansable participante de actividades en todo el país y a nivel internacional. Realizo dos giras europeas, una acompañada de Luz Recagno y otra por Sara Méndez.

En 1992 es ubicada nuevamente Mariana, y le es restituida su identidad y son procesados los apropiadores.

El 19 de abril de 2007, integra la Comisión presidida por Mario Benedetti, del Museo de la Memoria.

El 27 de marzo de 2008, fue designada por la Junta Departamental de Montevideo, ciudadana ilustre.

Fue una impulsora del voto rosado, con el fin de lograr la anulación de la ley de caducidad en octubre del 2009. Durante una de sus últimas apariciones públicas, María Ester expresaba: "No hay que perder jamás la esperanza y tampoco la decisión de luchar".

Mantiene hasta los últimos días de su vida una infatigable búsqueda de su hija Maria Emilia y todos los desaparecidos. Fallece el domingo 5 de diciembre de 2010, a los 92 años de edad acompañada de su nieta Mariana en la Residencia San José de la calle Millán donde vivió los últimos años formando parte del proyecto solidario “Ibiray”. Al igual que muchos familiares, muere sin saber la suerte de su hija.

05/12/2010.